Triskelion

Fin del verano de 1771. Tres jóvenes españoles abandonan su anodina y predestinada existencia de provincias en busca de otro porvenir. Sus orígenes, cultura y valores difieren pero comparten, sin saberlo, el mismo anhelo: labrar su propio futuro lejos de su terruño. En la España de élites ilustradas y jansenistas de Carlos III, los tres muchachos identifican por distintos motivos una idéntica utopía geográfica: los confines de Nueva España, más allá de las Provincias Internas del altiplano septentrional mexicano. Un descendiente de hidalgos y conversos extremeños, un menestral catalán de Barcelona con orígenes pirenaicos y un seminarista de provincias gallego, se opondrán a lo que la rígida providencia ha planeado para ellos. Partirán primero hacia Cádiz para, desde allí, viajar hacia Nueva España con el salvoconducto de una compañía comercial barcelonesa. La casualidad unirá la empresa individual de los aventureros. A medida que conozcan los detalles de sus respectivas historias, acumularán certezas de que sus conocimientos y habilidades se complementan, como si alguien o algo se hubiera conjurado desde tiempos inmemoriales para encajar, ahora, su existencia. Solos, son meros buscavidas; unidos, sin embargo, constituyen la última esperanza para desentrañar el significado de un antiguo mensaje críptico. Parten de Cádiz con una misión común: localizar a fray Junípero Serra, la mayor eminencia del Imperio sobre la obra de Ramon Llull y, a la vez, un humilde misionero franciscano entregado a su tarea en los confines del remoto territorio de la California Nueva. Durante su viaje, entenderán a los Argonautas y a Odiseo. Tratarán de desentrañar el enigma viajando hacia él, para averiguar si el recorrido geográfico conduce al espiritual, y a la inversa. La empresa de los tres muchachos dará con uno de los textos más importantes jamás escritos, cuya belleza será aprovechada por Benjamin Franklin, padre fundador de Estados Unidos, para la mayor empresa jamás acometida. Franklin conocerá el escrito a través de un amigo, el profesor escocés Adam Smith, muy al pesar del escritor "tory" inglés Samuel Johnson, enemigo del norteamericano. Y el final de la historia se convertirá en principio.