Bag om Quetzalcóatl, La Serpiente de Pluma Preciosa
SAPIENCIA MILENARIA EN LA VOZ DE UN VATE ACTUAL "El viento de la noche gira en el cielo y canta." Pablo Neruda Sería bueno que todos los seres humanos escribiéramos alguna vez sobre el cielo, pues ¿no es la estratósfera el reflejo de lo inmenso? En este libro, Carlos Johnson Bordalí no sólo recupera la tradición mitológica de los nahuas -mis ancestros- sino que, a través del constante y profundo contemplar, invita a sus lectores a ver más allá de lo evidente; a refocilarse y resignificarse con todo aquello que puede estar plasmado en el firmamento, del cual, en los más de los relatos universales, provenimos como especie. En Quetzalcóatl, La Serpiente de Pluma Preciosa, El Cielo de la Divinidad, el poeta recupera las formas y los contenidos del México prehispánico, para interpretar ese imaginario y consignarlo con un estilo ecléctico donde se combinan tradiciones precolombinas con conocimientos propios de nuestro canon hispánico. El simbolismo inherente a esta cosmovisión que hoy pudiera parecernos un tanto ajena debido a los procesos de aculturación y transculturación que atraviesan a toda Latinoamérica está estrechamente ligado con el sentido literal, aun cuando " [...] se tiene con demasiada frecuencia la tendencia a pensar que la admisión de un sentido simbólico debe implicar el rechazo del sentido literal o histórico; tal opinión resulta de la ignorancia de la ley de la correspondencia, que es el fundamento de todo simbolismo y en virtud de la cual cada cosa, procediendo esencialmente de un principio metafísico del que deriva toda su realidad, traduce y expresa ese principio a su manera según su orden de existencia, de tal modo que, de un orden a otro, todas las cosas se encadenan y corresponden para concurrir a la armonía total y universal".René Guénon, Diccionario de Símbolos, Juan Eduardo Cirlot.En esa relación entre los planos simbólico, literal e histórico, con un dominio exacto de las formas usadas por los pueblos originarios mesoamericanos, el poeta se sirve de algunas figuras retóricas tales como difrasismo, el paralelismo, el epíteto o adjetivo poético, el oxímoron, la perífrasis, la metáfora, la metonimia y sinécdoque, la comparación, la anáfora y finalmente, la figura conocida como polípote.En la lírica de este bardo, el espacio visual es otro elemento importante, tal como para los autóctonos lo fue el espacio simbólico dentro de los códices: éste permitía jerarquizar, sintetizar y organizar todo el conocimiento cosmogónico e histórico de las épocas. Celebro la inclusión de iconografía originaria en el poemario: elemento que lo embellece aún más... Para concluir, me parece adecuado señalar que hablar sobre el cielo es hablar sobre el tiempo y el autor lo sabe de cierto: ha leído en las constelaciones, como si de las líneas de una mano se tratara, las edades del universo y lo ha aderezado con la sapiencia de los ancianos de nuestros milenarios pueblos, en particular de la señalada cosmogonía mexica. Por eso es preciso que lo leamos y lo escuchemos; que surquemos de la Divinidad los cielos.¡Enhorabuena, Carlos! No me queda sino desear que tus lectores disfruten el vuelo mitológico al que hoy los invitas y que has dispuesto en tu verbo. Horacio Saavedra Castillo Escritor y catedrático mexicano. Guayaquil, Ecuador.
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