Bag om LA GALLEGA MARI HERNÁNDEZ
De dos peligros, Beatriz, por excusar el más grave, se ha de escoger el menor. ¿Qué importa que el rey me mate? Ya sé que a voz de pregones me busca, y por desleales condena a cuantos supieren de mí, sin manifestarme. El rey don Juan el segundo de Portugal y el Algarbe, que aunque airado contra mí, mil años el cielo guarde, dando a traidores orejas, que persiguiendo leales, quieren de bajos principios subir a cargos gigantes, ha cortado la cabeza a don Fernando Alencastre, primo suyo, y duque ilustre de Berganza y Guimaranes, por unas cartas fingidas, que su secretario infame contrahizo y entregó, en que da muestras de alzarse con la corona, escribiendo a los reyes que ignorantes de este insulto, las reliquias destierran del nombre alarbe. A Fernando e Isabel digo, que a Castilla añaden un nuevo mundo, blasón de sus hechos alejandres.
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